23.2.08

Aki's Love

Mi padre...


Es sábado. Entro en el salón de la casa, y allí, en la mesa, con la cabeza ligeramente inclinada hacia delante, medio dormido, medio intentando leer el periódico, mi padre. En abril hará 88 años. Toda una vida. Lo miro con cariño. No habla mucho de que espera ya de la Vida, o como desea llegar a lo inevitable. Se me han humedecido los ojos esta mañana. Le agradezco tanto su compañía, su amor, sus desvelos, sus preocupaciones, sus cabreos…

Si, ya se. Se supone que iba a empezar con una entrada ingeniosa, con un punto irónico, y allí está él, que me ve y me llama para decirme que le diga que le pondría yo al “Osasuna - Atlético de Madrid”. Sabe que no me atrae el fútbol. Pero se emociona con pequeñas cosas, y una de ellas es hacer una quiniela, como él dice “porque ya soy muy viejo, y estaría bien que os dejara de herencia un premio como este, ¿que no?” Como no apreciar su sentido tan peculiar de lo que es amar a los hijos.

El otro día vino a verlo la enfermera, para sacarle tapones de cera de los oídos, pues oye poco el abuelo. Le dijo que aunque tuviera la rodilla fastidiada y le duela, que camine. Que no se quede sentado todo el día. Y el se mosquea, sobre todo si se lo dice el médico y delante de nosotros. Claro que yo lo entiendo. Si te rueda un tronco de árbol en la Amazonia mientras estás con los indios, y te da en la pierna, como que te hace algo. Si te caes dos veces al Orinoco hace 40 años, cuando era en canoa y con pirañas por todos lados. Si te ataca un puma -jaguar- en plena sabana venezolana. Pues ahora como que no quiere preocuparse por su rodilla. Son cosas que pasan, claro…

No, si al final va a resultar que mi padre va a salir más en este blog que yo. Él sí que ha vivido experiencias de las que salen en documentales de Odisea. Yo espero vivirlas también. Todavía me quedan cincuenta y dos años para alcanzar su edad. Toda una Vida, os lo puedo asegurar, para sentirla correr en mi interior, y expresarla en este Mundo.

Es sábado. Aún tengo algo de tiempo. Os dejo, de momento. Vuelvo a entrar en el salón…

3.2.08

Más y más cambios


Situaciones cotidianas… Reconozco que esta no lo es. Supone un cambio en mi vida, o quizá no sea un cambio, dependiendo de qué rumbo tomen los acontecimientos. No me queda otro remedio más que afrontar la situación, y sacar una experiencia de ella. Os estaréis preguntando. ¿Y de qué se trata?

Pues lo contaré brevemente -se supone que os estoy revelando secretos de estado, según lo firmado con el jefe. O sea, que es un post “Top Secret”-.

Liquidamos la empresa. Mejor dicho, la liquidan mis jefes. Para abrir otra limpia de historias, en otro pueblo a 50 kms de la actual. Como jefes a la usanza de que lo que importa es el dinero -siempre y cuando les llegue a ellos primero-, pues el que quiera cambiar a la empresa nueva, tiene que renunciar a su antigüedad en esta -liquidación, te echarán de menos-. Los que hemos decidido quedarnos, liquidaremos, cobraremos, y, quien sabe después. En mi caso me quedo. 12 años de trabajo te dan ciertos derechos -y un pelín de dinero, claro está-. Igual se van a la m….., porque ya se queda al menos una cuarta parte de la oficina. Y somos alrededor de 90 personas -solo en oficina-.

Me viene a la mente un compañero -Pedro, Osi entre él y yo-. Según él, todo lo que le pasa, es porque Dios se lo envía. Todo. Ni una pizca de libre albedrío. Cero patatero. O lo tomas, o lo tomas. Le han pedido que se vaya con los nuevos, le han insistido. Será cosa del de arriba, que me lo quiere así. Hay sensibilidades respetables. Pero por favor, yo prefiero elegir por mi mismo, aunque me equivoque y tenga que rectificar.

Si al menos hiciera el suficiente frío en esta Murcia City, podría decir que se les ha enfriado la sesera -o sea, la cabecita, el perol, la mollera, el tarro…-. Pero no. Con días que alcanzamos en enero los 20 grados, no me vale como explicación. Para mí que ya vinieron así cuando los compramos.

Pero ya basta de hablar de trabajo. Hoy, mi sobrina de 10 años, para variar, me ha dicho que estoy un poco loco. Según ella, yo soy una persona mayor -ja, mayor con 36 años!-, y no ve claro el que juegue con ella a sus juegos, me atreva a tararear y cantarle canciones de Disney, el que le gaste bromas… En el fondo la comprendo. Solo tiene dentro de su entorno familiar gente aburrida, cansada de la Vida, sin ilusiones, sin metas, gente vaga y perezosa, o con ideas pasadas de padres a hijos que no han sabido mejorar y transformar aún.

Dejaré que siga de momento la pequeña pensando que estoy un poco loco. Con el tiempo entenderá que ese tipo de locura te ayuda a sentirte y mantenerte muy vivo.

Ah, y mi mejor amiga se ha comprado un portátil. Por fin. Ya la picaré para que escriba en su espacio personal. Y me regale un texto para mi blog. Una poesía quizá. La mujer tiene fuerza interior para escribir lo que siente, y siente y vive de una manera especial. Bien por ella. El número de estudiantes para sabio conectados a la red aumenta…

Nos vemos!.